5 cm/s
«Viviendo únicamente para uno mismo, la tristeza se va acumulando... en las hojas puestas al sol para que se sequen, en el cepillo de dientes... en el registro de las llamadas del móvil.»
5 centímetros por segundo, Makoto Shinkai
En 2020, después de meses de confinamiento provocado por la crisis sanitaria de la COVID-19, sentí la ciudad como un espacio vivo, donde la naturaleza había florecido de manera extraordinaria. Su capacidad inherente de generar vida supuso un soplo de esperanza. Mensaje que quise compartir sustituyendo el papel, soporte habitual de mi trabajo, por la calle a través de una intervención urbana: Las flores y el arte también curan. Una forma, además, de poner en valor el poder de la naturaleza, el arte y la cultura.
A partir de ese momento, empecé a desarrollar este proyecto. Un reto en el que pasé de utilizar el papel como soporte plano, a componer con volumen. De este modo, utilizando como material de trabajo noticias impresas relacionadas con la pandemia y seleccionadas desde el inicio de la misma, creé una instalación floral en papel, que simboliza nuestra capacidad de resiliencia, un año después de esa intervención urbana que realicé con flores recogidas durante uno de los primeros paseos permitidos en mayo 2020.
Esta intervención, que realicé durante la primavera de 2020, es el punto de partida de 5 cm/s. Título inspirado en la película homónima de Makoto Shinkai que indica la velocidad a la cual los pétalos de cerezo caen del árbol; siendo estos una representación metafórica de las personas, el paso del tiempo y la distancia. La naturaleza se convierte así en el hilo conductor de este proyecto, donde reflexiono sobre las relaciones humanas, y el ciclo de la vida. De este modo, canalizo el sentir colectivo y la experiencia individual vividos durante la pandemia con el fin de acercarnos a esta experiencia desde una perspectiva regeneradora y casi catártica para ahondar sobre el trauma y el dolor.
Durante dos años recogí de manera meticulosa noticias sobre la COVID-19. Estas, gracias al asesoramiento y apoyo de Carmen Ledesma, fundadora del taller de botánica artesanal Níkua, fueron las hojas y pétalos que dan vida a las flores de la instalación. Todas ellas están realizadas a mano. Cada hoja, pétalo, pistilo y tallo se ha realizado de manera particular. Cada elemento ha sido recortado, pintado, moldeado y pegado de manera artesanal. Por lo que cada una de ellas es única, como cada una de las experiencias vividas durante ese período.
Las ramas donde se ensamblan son naturales, únicamente han sido podadas para ajustarse al diseño ideado. Fueron recuperadas de los estragos producidos tras el temporal Filomena, en homenaje al ramillete recogido de la calle, génesis del proyecto.
Estas flores ramificadas que crecen a modo de crónica visual recogen las diferentes olas de la enfermedad. Las hojas y los pétalos fueron cuidadosamente seleccionados, para que capturaran palabras e imágenes que marcaron aquellos tiempos, con la finalidad de ser testimonio de lo sucedido, generando un flashback visual.
Tomando la conexión consustancial entre ser humano y naturaleza, junto con el papel como base de mi obra, este trabajo presenta a la misma como símbolo y vehículo que nos conecta con la vida y la capacidad de resurgir desde una experiencia traumática.
Proyecto expuesto en Arte Efímero, Madrid, en mayo y junio de 2021, en Art Battalion vol. 5, en bajos del Edificio España, Madrid, en septiembre de 2021 y HYBRID Art Fair 2022 con la galería LAECLÉCTICA, comisariado por Andrea Perissinotto.